Rick Florino, director en jede de ARTISTdirect, ha escuchado algunas canciones del nuevo álbum de Linkin Park en una sesión de audición y publicó sus ideas sobre canciones en su sitio. Ellos hablan acerca de un par de canciones (LOST IN THE ECHO, IN MY REMAINS, BURN IT DOWN, LIES GREEN MISERY, I’LL BE GONE, CASTLE OF GLASS, VICTIMIZED, ROADS UNTRAVELED, SKIN TO BONE, UNTIL IT BREAKS, y POWERLESS). Al final del artículo dicen esto, “No es solo Living Things uno de los mejores discos de la década, es un nuevo clásico. Una vez más, Linkin Park levanta la barra. Se trata de un híbrido como nunca lo has escuchado y no volverá, hasta su próximo álbum".
Fuente: Mike Shinoda Clan
Linkin Park perfecciona el propio concepto de un híbrido musical en su quinto álbum tan esperado, LIVING THINGS. El director en jede de ARTISTdirect.com, Rick Florino, consiguió experimentar de primera mano en una sesión de audición...
De hecho, todo lo mejor, brillante, y todos los elementos mas brillantes del sonido del grupo se han sustraído a este ofrecimiento y después ampliados. No solamente el disco cumple con la promesa establecida por el primer single incendiario “BURN IT DOWN”, ello supera toda expectativa-y algo más.
Vamos a sacar esto del camino en estos momentos. Este es el mejor disco de Linkin Park y un hito para el rock en general. El 26 de junio los fieles de la banda y fans de la música en general tendrán un viaje increíble.
LIVING THINGS viene a la vida con un destello de cacareando comentarios sobre “LOST IN THE ECHO”. Pronto, todo está subsumido por los estremecedores golpes de baterista Rob Bourdon y la hechicería aireada de sintetizador por Joe Hahn. Guitarras de Brad Delson destripan el oleaje como Mike Shinoda lanza en un comienzo el verso hermético con las palabras: “You were that foundation”. Chester Bennington suena poderosamente prístino durante el estribillo de tamaño de estadio, cerrando en una armonía impenetrable con Shinoda. Siguen siendo el dúo más interesante en la música en general, y su interacción aquí es totalmente alucinante. Un frenesí cibernético arde durante un puente rayado antes de los ecos de Bennington, “This time I finally let you go”. El bajo de Phoenix retumba en todo el paisaje, y de repente estás sumergido en un mundo regido por estas seis personas.
Un torrente de rayar combustibles de percusión masiva bailable en “IN MY REMAINS” como se entrelaza la entrega divina de Bennington con electrónica brillante. Tambores militares marcan la sección media de la canción como Shinoda elegantemente canta una armonía inquietante sobre el piano anunciando, “Like an army falling one by one”.
“BURN IT DOWN” es ya un himno atemporal en su propio derecho, jactándose ese inevitable e irresistible estribillo. Shinoda suena como que está rapeando desde otro universo en el deslizante y asombroso “LIES GREED MISERY”. Una cachetada majestuosa de la perra del siglo XXI, es glitched-out, hard rock jodido.
Palmas sutiles rebotan con los teclados durante el principio de “I’LL BE GONE” antes de otro gancho instantáneamente incisivo. Es un firestarter con riffing más rápido de Delson. Hay una elegancia tradicional con el espacio “CASTLE OF GLASS”, poniendo de manifiesto algunas letras más peloticas de Shinoda y Bennington hasta la fecha – “I’m only a crack in this castle of glass.” La banda se las arregla para aprovechar esos momentos de vulnerabilidad indie antes de su cada vez más pesada pista “VICTIMIZED”.
Ellos nunca han hecho nada fuerte y brutal. Paranoica y con tambores tribales antes de un gancho de garganta. Es cruel, violento y vibrante. Esta inesperada caída es jodidamente enferma. Prácticamente puedes visualizar multitud de festivales rompiendo el suelo de éste.
“ROADS UNTRAVELED” asiente a rock clásico, pero es diferente a todo lo que has oído, especialmente una vez los éxitos grandes distorsionados. Hay un rayo de valor electro a “SKIN TO BONE” antes de que todo consiga disparar todo en el estribillo, otra grata sorpresa. En el otro extremo del espectro, “UNTIL IT BREAKS” se destaca como la balada más conmovedora de la banda siempre.
Todo culmina en el cine más cercano “POWERLESS”. Tiene el peso de un score de John Williams y el poder de cualquiera del mejor resultado de Linkin Park.
No sólo es Living Things uno de los mejores discos de la década, es un nuevo clásico. Una vez más, Linkin Park levanta la barra. Se trata de un híbrido como nunca lo has escuchado y no lo hará otra vez, hasta su próximo álbum.
El mundo ha estado pidiendo a gritos un álbum de rock grande, y eso es todo.
Fuente: Mike Shinoda Clan
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